Rafael del Barco Carreras
Barcelona 16-05-2012. Lo he repetido mucho pero nunca es suficiente, de los mejores escritos sobre mis por desgracia abogados lo leí en el blog de Pilar Rahola... con reacción muy negativa... ella formaba a mi criterio parte de aquella hipócrita Barcelona a la que acusaba.
Lo sabía toda Barcelona · ELPAÍS.com
Pascual Estevill y Piqué
Vidal tejieron una telaraña
que se convirtió presuntamente en la red de corrupción más importante de la Cataluña va bien. ...
PILAR RAHOLA 18/09/2004 ... Pascual
Estevill y Piqué Vidal tejieron una telaraña que se
convirtió presuntamente en la red de corrupción más importante de la "Cataluña ...
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18 Sep 2004 – Pascual Estevill y Piqué Vidal tejieron una telaraña que se convirtió presuntamente en la red de corrupción más importante de la "Cataluña va ...
Cap. 5 13-2-97, prisión Luis Pascual Estevill. El juez Moreiras conferenciante para Iberforo en Barcelona, “sobre la personalidad del estafador”. Currículum Miguel Moreiras Caballero. Corte de Londres, 500 millones de dólares. Sociedades inexistentes. La juez Teresa Palacios sustituye a Moreiras. Archiva Macosa. Jueces, fiscales y bancos suizos. Thierry Kern, banquero suizo, de Pascual, y Telefónica Terra. Juan Vilallonga, amigo Aznar, presidente de Telefónica. Endemol, la Trinca.
TERCERA PARTE
Luis Pascual Estevill
Juan Piqué Vidal
Jordi Pujol
1995-2005
Cap. 5 13-2-97, prisión Luis Pascual Estevill. El juez Moreiras conferenciante para Iberforo en Barcelona, “sobre la personalidad del estafador”. Currículum Miguel Moreiras Caballero. Corte de Londres, 500 millones de dólares. Sociedades inexistentes. La juez Teresa Palacios sustituye a Moreiras. Archiva Macosa. Jueces, fiscales y bancos suizos. Thierry Kern, banquero suizo, de Pascual, y Telefónica Terra. Juan Vilallonga, amigo Aznar, presidente de Telefónica. Endemol, la Trinca.
El día 13 de febrero de 1997 entra en La Modelo, Luis Pascual Estevill. Leída la inesperada noticia, me dejó indiferente. De nuevo lo del “flagelo de la burguesía”. Perdió el pulso con quienes se sentían, y aún, más allá de la propia Ley. ¡Una sinrazón, la Caixa, la Generalitat, la Casa Real, y todo quisque cruzado en su camino, pensé!. ¿A tanto le forzó Piqué Vidal?. Yo no lo creía. El Frankenstein creado por el gran alquimista de la Ley, terminando el engrudo de distinguidos catedráticos, se le escaparía de las manos. Con centrarse en las decenas de narcotraficantes, a diario entrando en prisión, sus cuentas suizas rebosarían. Sin riesgo. Los he conocido en el 92 inmiscuyéndose en las conversaciones con los extorsionados por Pascual, preguntando por su “solución”, o al contarles mis desventuras con el ya ex juez, directos a lo suyo, el pago, y por tanto la libertad. Alguno había pagado, jurando matar a su abogado cuando saliera. “¿Tú de qué país vienes?, por dos millones no pretenderás la libertad, eso es para empezar”. Pascual tuvo suerte, en un magazine del Mundo leí que Herodoto contó que el emperador persa Cambises hizo desollar vivo al juez Sisamnés por un veredicto injusto, ¡y ni habla de cobrar!. Con que pagara los años de cárcel que por su culpa yo y otros pasaron, habría bastante. ¡A él que se deprimía si me visitaba!.
Si Pascual era trasladado a la
Roca al módulo destinado a las “fuerzas del orden”, De la Rosa gozaba de
libertad, e indefinida. El Juez Moreiras a un mes de no encontrar la
tipificación de los delitos de Javier, era invitado a una conferencia en
Barcelona, y en primera fila Juan Piqué Vidal con preguntas para lucimiento del
Juez conferenciante. “Sobre la personalidad del estafador”. El sumun de la
desfachatez. Ni comentario a que la “administración fraudulenta no constituye
delito ya que todavía no se ha incluido en el Código Penal”. ¡El hombre clave en
los conflictos económicos de gran enjundia en España!. Ni la policía ni los
loqueros se lo llevaron del juzgado. La conferencia con estancia en el Hotel
Juan Carlos I pagada por Iberforo, o sea Piqué Vidal. Los kuwaitíes se subían
por las paredes, ¡y los españoles critican la Justicia de los países árabes!.
Miguel Moreiras Caballero, juez
de Delitos Económicos de la Audiencia Nacional, aguantó con estoicismo la mordaz
prensa. Desde el 21 de noviembre del 93 que El País le dedicara páginas enteras,
las “alabanzas” subían de tono. Dispuesto a arrastrar carros y carretas, ya
arrastraba dos años de suspensión de empleo y sueldo. El riesgo a favor de De la
Rosa, compensaría. A su paso por Vigilancia Penitenciaria la cárcel se abría con
sospechosa irregularidad. Otra sanción por alterar la fecha de un certificado
médico y acudir a las Olimpíadas de los Ángeles. Norteamérica le encantaba, y
pediría un año de excedencia para gozar del país de sus sueños. ¡Los ahorrillos
de un juez!. A las travesuras se sumaron autos con evidente interpretación,
prevaricación y soborno. La Sala le obliga a procesar a De la Rosa señalándole
los delitos. Relativo caso, su obstinación continúa, y por primera actuación
rechaza la petición de prisión. A la presión de los abogados de los kuwaitíes,
Stampa Braun, Manuel Cobo del Rosal y Miguel Bajo, les contesta que su juzgado
está en pleno colapso de casos. El argumento de Remei Bona para el caso Pascual,
con la variante de las estanterías, y Álvarez del Consorcio, para no investigar.
Los kuwaitíes no estaban en buenas manos. Cobo del Rosal, con fama peor que
regular, defendía en el Supremo a Pascual Estevill, y Stampa Braun, amigo y
abogado del padre de Javier. A los sorprendidos árabes los ochocientos años de
cultura en la Península Ibérica no les acercaba a la idiosincrasia actual. Tan
despistados como yo la primera vez que caí en la red.
Repasar el currículum de Moreiras
en su vertiente profesional antes de que unos genios de la judicatura y política
le eligieran, y sus actuaciones posteriores, demuestran la refinada ideología
dominante. No se trata a lo Pascual Estevill recomponiéndole unos méritos y
sabiduría leguleya, a Moreiras ni mentiras ni milagros maquillarían su vida
profesional. La Ley de Peter, sobre el adecuado a cubrir la jefatura del
ascendido, sin salpicarle su bagaje, no resume toda la perversidad del ambiente
eligiendo a Moreiras. De broma lo del “nivel de incompetencia” por ascender al
tontorrón, que no haga sombra, o peligro de denuncia, sino una decisión
maquiavélica. ¿Se inicia una clásica cadena de complicidades mafiosas?. Su
experiencia se limitaba a los juzgados de Viella, Ronda e Ibiza (¿abusaría de
las hierbas ibicencas?), Vigilancia Penitenciaria en Madrid, y Magistratura de
Trabajo en Ciudad Real. ¡Buen bagaje para enfrentarse a la “amistad” de Piqué
Vidal, a sus conferencias, y al grosor de la Corrupción Nacional!.
Un suponer, a su paso por Madrid,
juez de Vigilancia Penitenciaria, dejaría especiales muestras de actuación,
cobrando o por favores a otros magistrados o funcionarios, marco adecuado para
ser recomendado a un cargo de máxima responsabilidad, clave para las elites
dirigentes. Un electricista acumulara mejor experiencia para bregar con La
Cooperativa del Sindicato UGT, decenas de miles de millones, el Banco de
Santander y sus ocultaciones fiscales a base de endosar créditos a sus
depositantes, Macosa, Indelso o facturas para IVA, remitido desde Barcelona por
Pascual Estevill, Arthur Andersen (la corrupta gran censora de cuentas), el
Banco Europeo de Finanzas, el empresario Benedicto Alfaro y el suicidio del
denunciante Baltasar Egea, y un largo etcétera, con alguna que otra ocurrencia
de ingresos y salidas rápidas de prisión (unos días a Alfaro) o supermillonarias
fianzas retiradas al día siguiente. Y nadie actuará de oficio. Un calco a
Pascual, y ya comparando recordar una querella por prevaricación interpuesta por
el empresario Joaquín Fernández, encarcelado tres días, que no prosperó.
Moreiras sabedor de la mecánica de Pascual quizá lo imitaría, más moderado
eligiendo víctimas o menos ambicioso. Lo del electricista, un mal símil, los
actos demostraban tendencias especiales. Ni las necesidades españolas de
petróleo, 50.000 barriles diarios, condicionarían al Juez Moreiras. Ingenuidad
kuwaití sobre que esa nimiedad torciera el recto entender de la Justicia
Española. Y el momento era delicado para la economía española con una inflación
galopante y debiéndose regularizar los parámetros financieros ante el ECU
europeo. ¡Estúpidas consideraciones!.
El 97, y siguientes, tranquilo
comparado con el 94. Sin embargo los kuwaitíes no cejan y atizan su querella en
Londres. En Madrid, imposible. Similar a la defensa a ultranza de cualquier
secretario de juzgado de pueblo ante un ejecutivo de fuera contra su amigo de la
infancia. La Corte de Londres y la Audiencia Nacional, en su auto enderezando al
juez instructor Moreiras, abrían camino contra toda le maraña de corrupciones. Y
Londres destapa parte del laberinto de sociedades, Croesus, Pincinco, Wardbase,
Oakthorn, y cientos en todos los paraísos fiscales, o las cuentas de los
intermediarios, Prado y Sarasola, de Felipe González, con el veinte por ciento
de los 500 millones de dólares trasferidos desde España en plena ocupación de
Kuwait. Convincentes las afirmaciones de la “oposición” kuwaití de que la
aristocracia en el exilio, y el ocupante Saddam Hussein, pidieron, lógico, el
bloqueo de los fondos de KIO. Únicamente Felipe González podría autorizar el
pago de esos 500 millones de dólares. Y varios comentaristas afirman se le pasó
a la firma el decreto de la intervención de los saldos, origen de las comisiones
a Prado y Sarasola.
En Londres sonreían a las
declaraciones de Javier a la prensa española, en franca campaña de intoxicación,
sobre que esos fondos se destinaron a poner las bases militares a disposición de
la guerra del Golfo. Ni mencionar en la prensa londinense la Asociación para la
Defensa y Libertad del Pueblo Kuwaití. De risotada. Se reunieron concluyentes
pruebas vía Suiza, abarcando con gran sorpresa los delegados e inspectores de
Hacienda en Barcelona, Ilustrísimo Ernesto Aguiar Borrás, y los inspectores
jefes José M. Huguet Torremade y Ramón Lanau Viñals, o el insignificante Pernas,
amigos y compañeros, de terruño y apartamentos en el Alt Urgell del ministro
entonces Borrell, y socios de Pascual Estevill. El abogado Folchi, ex de Javier,
cantó ayudando a los suizos. Las amistades y subordinados de Borrel le costaron
su candidatura a Presidente del Partido Socialista, pero la voluble política le
haría Presidente del Parlamento Europeo. Rizando el rizo afloran en las cuentas
de los intermediaros de KIO talones de Siemens librados en Suiza. Las
multinacionales alemanas para contabilizar y deducir los sobornos en “países
tercermundistas” pagan con cheques, y sus responsables sostienen que pagaron los
sobornos por las instalaciones eléctricas del AVE Madrid Sevilla. Roldán, forma
parte de la cadena, compensando en Madrid o en Suiza, y cobrándose a través de
los intermediarios, Prado y Sarasola. Y nadie detenido en Madrid o Barcelona por
los flagrantes delitos descubiertos en Londres. Parecido, pensaba yo, a cuando
el fiscal Escusol me escuchaba con cara de póquer ante mis declaraciones
señalando las implicaciones del Banco Garriga y Nogués. La “alarma social”,
esgrimida a voluntad del control de la prensa por el Poder, no se dará, la gente
“se lo toma a cachondeo”.
En todos los procesos contra
Javier afloran cartas falsas. Los responsables de KIO en Londres ordenaban
transferencias, casus belli, a sociedades de las de intermediación,
inexistentes, constituidas con posterioridad para otras intermediaciones. A eso
le llamaría yo perder los papeles o alguien colándole un gol. ¿Lo habrían
relegado a triste firmón en ese complejo trasiego?. Pobre Javier, las adicciones
descubiertas en la cárcel de Brians pasaban factura, o como su padre delegaba
firmando talones en blanco olvidados por los cajones del Consorcio de la Zona
Franca. Imaginarlo en puro delirium tremens traspapelar sociedades traídas del
futuro, una triste gracia. Entre las sociedades verdaderas y falsas se
encontraría en un registro un pasaporte “verdadero” de un país sudamericano con
nombre falso y su fotografía. Además de indispensable en una fuga que se precie,
como la paterna, esas documentaciones enmascaran posesiones y cuentas. Silencio
total de la fiscalía barcelonesa. Flagrante delito olvidado. Una de las estafas
en el mundo del hampa consiste en vender documentaciones, y tan falsas que los
compradores caen como moscas al utilizarlas, pero la encontrada además de
certificar excelentes relaciones oficiales en países sudamericanos, clarificaba
la concienciación y preparación de la huida precisamente cuando el Consorcio y
Banco Garriga. Una confesión de su culpabilidad.
Lo controlado, se descontroló, la
quinta columna funcionaba. En el 97 el Juez Moreiras por una nimiedad es
relevado de su plaza y destinado a “provincias”, a lo social de nuevo. La
sustituta, Teresa Palacios, si en principio archiva el caso Macosa (en la
chimenea monumento de Pueblo Nuevo se conmemora la lucha obrera pero ni
comentario sobre el robo y especulación de esos terrenos) porque los hechos
denunciados no constituían delito. Acusados, Eduardo Santos, el socialista con
casa en Miamy, Escámez, Pedro Nueno, Nicolás Garrido e Ignacio García Nieto, de
la gran familia de los Riva y García, con presencia en la Asamblea del Consorcio
de la Zona Franca, extorsionados por Pascual por las malas prácticas de no
acordarse de los accionistas minoritarios y venderse los activos a favor del
mayoritario Banco Central. Otro caso, como el del IVA, enviado por Pascual a
Moreiras, sangrado en Barcelona pero con mucha grasa a cortar. Palacios no
seguiría ese camino en otros miles de millones esfumados con relevantes
personalidades implicadas.
Quienes ni se inmutaron por las
“relevantes personalidades implicadas” fueron los fiscales y jueces suizos en
los casos de Pascual y De la Rosa. En tiempo record luchando contra la
poderosísima banca suiza y su total oscurantismo remitieron datos a Londres y a
España, con la sorpresa en cuanto a España que sus pruebas se pusieran no solo
en cuarentena, sino entorpecidas en sus traducciones y tramitación interior, y
recusadas por trivialidades.
Al fiscal Bernard Bertosa,
socialista elegido por el Cantón de Ginebra, y al juez Daniel Devaud, con
seguridad las trifulcas londinenses no les importarían por ajenas a armas o
drogas, pero lo oído por los afectados españoles, de primera mano, sin reparar
en viajes y tiempo, sobre un juez utilizando la cárcel de zulo para extorsionar
(versión oficial española del secuestro de guerrilleros, mafiosos y etarras),
les impresionaría, a juzgar por sus muchas gestiones y viajes a Barcelona. Se
localizó una cuenta de 600 millones de Pascual que aun embargada desapareció del
Banco Darier Hertz et Cíe., (el banco donde casualmente le ingresaron 25
millones para acusarlo de soborno), en excelente gestión de su apoderado y
recolector de fondos en España Thierry Kern. Muy cómodo abonar en su banco
suizo, basta con entregarle el dinero en su mansión de la Costa Catalana. Y si
por un descuido de juzgados embargan el saldo, garantiza el importe
transfiriéndolo a paraísos más seguros. Se presenta el hijo de Pascual en Suiza
y firma la orden. Ni a él ni a Eduardo Santos y los de caso Macosa, exonerados
por la Jueza Palacios, les repercutirán 134 millones ingresados en esa cuenta
del Juez.
Un activo banquero el suizo que
actuará en Telefónica y Terra, la especulación en bolsa más brutal de la
Historia de España, donde el amigo del nuevo Presidente del Gobierno Aznar,
nombrado presidente de la Telefónica, Juan Vilallonga, agente de bolsa,
superaría hasta ridiculizar las cifras de Mario Conde y Javier de la Rosa. El
IBEX 35, desde la cota de 12.800 puntos en 1999, se desinfló para sorpresa de
millones de ahorradores hasta 5.000 puntos (la culpa, las nuevas tecnologías,
dirían), y refinado cretinismo vocear el éxito de los 10 mil, seis años después,
cuando cientos de miles de ahorradores, recomendada la inversión por sus cajas y
bancos (Caixa y BBVA, agentes principales), han perdido a favor de extrañas e
hinchadas operaciones de compra por parte de Telefónica. Endemol, Licos y Terra,
casi 4 billones por la ventana (a bolsillos concretos). Y comparándose a los de
ERCROS, sus ejecutivos blandirán las “estoch opcion” para cobrar su blindados
contratos, miles de millones (hinchar un valor, Terra, de 200.000 millones a 4 o
5 billones, para caer por debajo del nominal al poco, merece un premio añadido,
y lo exigen). Pero los muy entendidos en bolsa, los Vilallonga, no hubieran
alcanzado tal grado de especulación de no contar con la fuerza financiera de sus
socios, la Caixa y BBVA, o sea, todo el dinero del país metido en el baile. ¡Es
la bolsa!, les contestarán cuando denuncien en los juzgados. La “España va bien”
de Aznar un símil del Ministro Solchaga con la facilidad de hacerse rico en
España. La Comisión Nacional de Mercado de Valores o inútil o corrupta. Los
norteamericanos se enfadarán por la descarada utilización de sus bolsas, y aun
hay pendientes varios procesos. Allí se detiene a docenas de ejecutivos por algo
parecido. El práctico monopolio, las tarifas al alza, la expansión del mercado
de los móviles, y las repetidísimas especulaciones en bolsa, paliarán con los
años los estropicios. A la larga la propia CAIXA cargará a sus cuentas de
explotación unas decenas de miles de millones.
Una tontería, que apenas llenará
prensa en España (y de tele una ínfima ridiculez comparado al tiempo de Belén
Esteban o la Duquesita de Alba). El dimitido presidente de Telefónica, se
divorciará de la amiga íntima de la mujer del Presidente español, se casará con
otra espectacular y triunfadora, y dejará la provinciana España para codearse
con los supermillonarios americanos a golpe de jet privado. Un día propondrá a
los rusos comprarles y modernizar su Telefónica. De agente de bolsa a ingeniero
en telecomunicaciones.
De ese inmenso latrocinio
corresponde a Barcelona el primitivo programa de Terra, Olé, vendido por la
Fundació Catalana de la Reserca de la Generalitat por 200 mil pesetas a un
empleado que lo venderá a Terra Telefónica por 3.000 millones. Recusado por su
estructura en castellano, se excusaron. También catalanes, la Trinca produciendo
con Endemol la famosa Operación Triunfo (todos forradísimos), el estrellato del
Agut de Tarrasa, presidente de Terra, el agente y banquero suizo, y de “torna”
el nombramiento de Fainé de la Caixa y Narcís Serra, como consejeros de la
Telefónica en Cataluña. ¡Será por sus conocimientos en pinchar teléfonos!.
Tampoco se desata “alarma social”.
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