Rafael del Barco Carreras

Barcelona 5-6-2016. El ‘ridículo’; argumento que utiliza Artur Mas para exigir a la CUP que retire la enmienda a la totalidad de los presupuestos… y los vote. El infantil ‘ridículo’ es una constante desde que en 2011 la ‘independencia’ se ha transformado en el único leitmotiv de la Política catalana. E insisto no solo ante el resto de España, sino del 52 POR CIENTO de los catalanes que votamos NO a la INDEPENDENCIA Y LA CORRUPCIÓN.

Deplorable y ridículo el artículo de Artur Mas en LA VANGUARDIA de hoy domingo:

Artur Mas i Gavarró

05/06/2016 02:17 | Actualizado a 05/06/2016 12:08

'Tenemos que aprobar los presupuestos. Como mínimo por tres razones: la primera, para aprovechar mejor un volumen significativo de dinero que el Estado nos debía desde hace dos años y que ahora está obligado a pagar; la segunda, para cumplir los acuerdos del mes de enero pasado que evitaron repetir las elecciones en Catalunya y que permitieron elegir a Carles Puigdemont como presidente y designar un nuevo gobierno para sacar adelante el mandato soberanista recibido en las elecciones plebiscitarias de septiembre del 2015, y la tercera, para no hacer el ridículo y no dar argumentos de debilidad y caos a los adversarios de la independencia de Catalunya, que son muchos y muy poderosos…'

Primera razón; el dinero que nos debe el Estado.

Segunda; cumplir los acuerdos que le apartaron del Govern.

Tercera; el ridículo ante los poderosos adversarios de la independencia… y ante el mundo.

Lo del dinero que nos debe el Estado, el ‘Estado que nos roba’, y al que la Generalitat debe no menos de la mitad de su deuda ¡72.000 millones de euros!, que le convierte en ‘bono basura’ según Moody´s, es un argumento solo entendible para forofos y los mejor pagados independentistas del Mundo. Un tópico-dogma.

La segunda, que le hayan apartado del Govern por representar la Gran Corrupción, no la ha asumido. Es fácil de entender para cualquiera; representa no ya la herencia Pujol sino el 3 o 20 POR CIENTO, más su firma en Liechtenstein. La CUP, y cualquier catalán, siente el ‘ridículo’ de un presidente con semejante bagaje.

El ‘ridículo’ ante el Mundo, tras sus campañas independentistas por EEUU y Europa, más las del Puigdemont, no tiene vuelta atrás. Cómo no lo tiene las constantes exhibiciones callejeras en las diadas ¡con cientos de miles de niños disfrazados de amarillo y banderas!... o partidos del Barça. De ‘vergüenza ajena’ o ‘ridículo’ para la mayoría de catalanes a quienes ofende ese fabricado patrioterismo de colegio de párvulos, pero ¡peligrosísimo!

Pero el mayor ‘ridículo’ a mi criterio sería su ‘omertá’, o encubrimiento y participación en y de la época Pujol, más no colaborar con la Audiencia Nacional. Y más ‘ridículo’ leerle, cómo si no formara parte de la Catalunya construida o destruida por el pujolismo :

‘hablamos, pues, de personas, de ser sensibles a las necesidades concretas de personas concretas. ¿En nombre de qué ideología negaremos a estas personas la mejora de su vida diaria? ¿En nombre de qué doctrina perjudicaremos el derecho legítimo de miles de personas a vivir una pizca mejor? Este año es el primer año después de cinco en que puede haber más recursos disponibles, sin necesidad de subir impuestos en Catalunya. ¿Desperdiciaremos esta mejora?’

¿Qué credibilidad tendrán el presidente Puigdemont o el conseller Raül Romeva cuando vayan a otros países a explicar el proceso para construir el Estado en Catalunya, si hablan en nombre de un Govern que no puede aprobar un presupuesto que contempla construir estructuras de Estado que hasta ahora no teníamos o teníamos de manera insuficiente?’

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